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domingo, 19 de enero de 2014

El efecto Gamonal

Navegando por la Red.- Diario Progresista.- 18 de enero.- Artículo de Josu Gómez
 
La barricada cierra la calle pero abre el camino, esa frase de la Revolución del Mayo francés del 68 parece que ha calado en el corazón del barrio burgalés del Gamonal que como una Numancia ha convertido su indignación en acción frente a quienes escondidos en una "crisis económica" decidieron recortar los servicios públicos de un barrio de clase obrera .
 
Un barrio que decidió decir basta ya, basta a los recortes en sanidad y educación pública a cambio de obras faraónicas como las del Bulevar que no sólo no son prioritarias sino que además suponen la privatización de las plazas de aparcamiento de este popular barrio de Burgos .

Que la historia es cíclica y se repite  es una afirmación marxista que en el ámbito de las revoluciones sociales tiene una perfecta prueba de su acierto, no por menos hechos tan significativos como la Revolución Rusa de 1917 o la más recientes como la Primavera Árabe tuvieron como mecha de inicio hechos que al principio se vieron como aislados pero que sirvieron de efecto dominio en un caldo cultivo de desesperación y agotamiento  que ante la falta de respuesta de las instituciones a los problemas de la ciudadanía ,sirvió como una pólvora perfecta para que la indignación se convirtiera en acción con la toma de las calles por parte de miles de hombres y mujeres que dijeron que hasta aquí habíamos llegado.

Hoy la epidermis de nuestro país ha cambiado, la desconfianza y la falta de credibilidad de parte de la ciudadanía a los partidos tradicionales mayoritarios que han conformado la alternancia en el poder desde la izquierda y la derecha en nuestro país esta haciendo que la aparición de nuestras fuerzas políticas hagan cada vez más quebradizo el pilar del bipartismo en España. Así esta búsqueda de nuevas sintonías políticas más acordes con su realidad de parte del electorado hace que tomemos conciencia clara de que algo esta cambiando, de que la tensión de la cuerda y el salto al circulo de fuego por el que los poderes financieros y de la derecha europea nos han hecho pasar tendrá consecuencias

Hoy , la revolución del Gamonal puede significar el inicio de algo mayor, de una idea peligrosa pero tal vez acertada por parte de una ciudadanía que puede llegar a pensar que sólo mediante la confrontación , mediante  las barricadas cesara este ataque inaudito contra los derechos y las libertades ganadas en el 78  tras una dictadura y que hoy en pleno siglo XXI son trituradas por la calculadora del poder económico y político neoconservador, obsesionado con lograr su programa ideológico máximo a cambio de destruir la educación, la sanidad y los servicios públicos .

 No han entendido los agoreros de la derecha económica rancia y caduca  que en una situación de crisis económica y falta de empleo los elementos que impiden el estallido social son los de la políticas asistencial y de cobertura social llevadas a cabo desde las instituciones. Por ello, recortes como los sufridos en educación o sanidad pública, la privatización de los servicios públicos, la congelación de la inversión pública como elemento reactivador de la economía sólo sirven a arrojar la gasolina necesaria para que nuestro país se encamine por una lado hacía la ruptura territorial – no por menos lo acontecido en Cataluña es una problema de índole económica más que identitaria- y por otro  hacía una lucha de clases entre quienes atesoran la mayor parte del poder y quienes empiezan a percibir que la única forma de que este se frene es la revolución social, revolución que hoy toma forma en el gamonal.  Por ello, es hora de que los partidos políticos tomen conciencia de que lo que hoy esta en juego es la propia democracia en nuestro país

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