Coleccionismo

Me parece que atrás quedaron las colecciones de pequeños sobre los cromos de fútbol, de dibujos animados o de casitas de papel. Pero hoy, varias décadas después, cuando el escepticismo ha ganado la batalla a la credulidad de muchas cosas, hoy, en este momento, he comenzado una nueva colección.

 

 Ingenuamente, la empecé a guardar, con comportamientos públicos, en un tarro de cristal que muy pronto estuvo lleno. Tuve que traspasarla a una caja de zapatos que ya tengo colmada .Igual empiezo a guardarlos en una gran urna de cristal comprada en la tienda de los chinos.

 

Colecciono mentiras, mentiras políticas, estupideces ,injusticias ,eufemismos y olvidos. Colecciono agravios, soberbias, desprecios y también prepotencias. Tengo muchos cromos de hipocresía, mezquindad y montones de desvergüenza.

 

Atesoro todo esto para no olvidar. Para tenerlo presente cuando lleguen las próximas elecciones europeas ,municipales y autonómicas.

 

Solamente me creeré aquello que me digan mirándome a los ojos y siempre que no les crezca la nariz. Y, si puede ser, ante notario.


Aguadores en Plaza Mayor.- 1930