Elena Rosa
Sidonie llevan casi 20 años de gira. Parece que Marc Ros (compositor, cantante y guitarra), Jesús Senra (bajo, teclados y coros) y Axel Pi (batería y coros) han encontrado la fórmula de la Coca Cola musical. El secreto parece sencillo; unos directos lanzados al corazón de los amantes del pop español de toda la vida, repletos de canciones que a cada gira crecen en las gargantas de los numerosos seguidores con los que cuentan en todo el país.
Marc Ros con El Peor Grupo Del Mundo (Sony 2016) ha vuelto a regalar media docena de melocotonazos imprescindibles y se ha convertido en el mejor community manager de la escena musical española, la llamada independiente. La Sala Urgencias y Sidonie sudaron la camiseta con El Peor Grupo Del Mundo, 300 personas que no dejaron de cantar, bailar y sonreír aproximadamente una hora y media.
Sin duda la noche del sábado prometía, el propio Marc tomaba el pulso al público: “Almagro tierra de teatro y berenjenas. Gracias por llenar La Sala Urgencias”. Hicieron todo lo que había que hacer, y lo hicieron bien. Los tres Sidonies se encontraban apoyados en el escenario por dos músicos más, añadían una segunda guitarra y unas bases de teclado. Un volumen que agrandó el repertorio pulido de sus discos en castellano, del que rescataron los temas más conocidos de sus cinco discos anteriores. Olvidando los temas en inglés, de sus dos primeros trabajos.
Pop plagado de referencias constantes a sus compañeros de profesión actuales y reminiscencias musicales a los sonidos de los ochenta. Lory Meyers, Mi Capitán, Egon Soda, Los Planetas o Supersubmarina se pasean en la letra ‘Carreteras Infinitas’, canción que cerró el directo antes del bis y que suponía el primer single de su último trabajo. El directo arrancó con una declaración de amor a sus sus seguidores, Os queremos. Entre las dos nuevas canciones, un ir y venir constante a la memoria, algo que produjo la simbiosis coral de público-grupo: ‘Fascinado’, ‘Sierra y Canada’, ‘Un día más en el vida’, ‘En mi garganta’ y ‘Costa Azul’ sonaron, entre otras.
El repertorio se mostró trufado de altas dosis de la perfecta máquina de pop que supone su último disco. ‘El Peor Grupo Del Mundo’ desplegó su presencia haciéndose notar importante en la discografía de Sidonie, es el que hace el número ocho. Se deslizó con el alma de los mejores Mecano el segundo single titulado ‘Siglo XX’, stonianos con ‘Fundido a negro’, cinematográficos en ‘Los coches aún no vuelan’, o luminosos en ‘Instrucciones para construir un submarino’.
Sin duda la noche del sábado prometía, el propio Marc tomaba el pulso al público: “Almagro tierra de teatro y berenjenas. Gracias por llenar La Sala Urgencias”. Hicieron todo lo que había que hacer, y lo hicieron bien. Los tres Sidonies se encontraban apoyados en el escenario por dos músicos más, añadían una segunda guitarra y unas bases de teclado. Un volumen que agrandó el repertorio pulido de sus discos en castellano, del que rescataron los temas más conocidos de sus cinco discos anteriores. Olvidando los temas en inglés, de sus dos primeros trabajos.
Pop plagado de referencias constantes a sus compañeros de profesión actuales y reminiscencias musicales a los sonidos de los ochenta. Lory Meyers, Mi Capitán, Egon Soda, Los Planetas o Supersubmarina se pasean en la letra ‘Carreteras Infinitas’, canción que cerró el directo antes del bis y que suponía el primer single de su último trabajo. El directo arrancó con una declaración de amor a sus sus seguidores, Os queremos. Entre las dos nuevas canciones, un ir y venir constante a la memoria, algo que produjo la simbiosis coral de público-grupo: ‘Fascinado’, ‘Sierra y Canada’, ‘Un día más en el vida’, ‘En mi garganta’ y ‘Costa Azul’ sonaron, entre otras.
El repertorio se mostró trufado de altas dosis de la perfecta máquina de pop que supone su último disco. ‘El Peor Grupo Del Mundo’ desplegó su presencia haciéndose notar importante en la discografía de Sidonie, es el que hace el número ocho. Se deslizó con el alma de los mejores Mecano el segundo single titulado ‘Siglo XX’, stonianos con ‘Fundido a negro’, cinematográficos en ‘Los coches aún no vuelan’, o luminosos en ‘Instrucciones para construir un submarino’.
El trabajo de los técnicos de sonido e iluminación fue muy profesional, teniendo en cuenta las posibilidad que tiene la humilde sala almagreña. Los catalanes no pararon en la escena, incitaron al público constantemente al disfrute, se encaramaron a los equipos de sonidos y se pasearon entre la apretada gente.
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