El barco y las ratas

Con honrosas excepciones, como Guindos o Morenés, los menos políticos, el Gobierno de Rajoy es el que nos ha traído hasta aquí. No, las ratas no tienen la culpa. La tiene el barco.
Y su capitán, aquél que dijo en frase para la historia: "no hacer nada también es tomar una decisión". O aquél otro que gritaba ufano en el Congreso que era el Gobierno que había subido más los impuestos en la historia de la democracia. O aquel que, en pleno desvarío independentista, se fue a hablar con Junqueras ¡como ministro de asuntos exteriores de España! O los últimos nombramientos de Villalobos, Sánchez-Camacho o Arenas en las mesas del Congreso/Senado como gesto de renovación. Pongan sus ejemplos: hay cientos.

No tenemos lo que nos merecemos, tenemos lo que se merecen ellos. Eso sí, la patada, en nuestro trasero. Necesitamos otro barco o, como mínimo, otro capitán. Efectivamente, España va hacia el desastre, pero distribuyamos correctamente las culpas. Las ratas, esta vez, no son las culpables de la peste que viene.


Fuente.- parte de artículo leído hoy en voz populi