Cuando las monjas Dominicas que quedaban en el Monasterio de la Encarnación se marcharon, podíamos imaginar que todos sus enseres y bienes muebles también se los iban a llevar a La Solana.
Es verdad que son sus propietarias, por muchas quejas que ahora tengamos del expolio que supone al Patrimonio de Almagro.
Las autoridades no han puesto en marcha ninguna medida, compra del edificio y permanencia en préstamo de sus bienes muebles, formando parta de un Centro de Interpretación de la Historia de Almagro.
Nos quejaremos unos cuantos...pero iniciativa en el sentido de protección de nuestro Patrimonio NO hay. En el pecado llevamos la penitencia.
Amén.
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