Estimado Director de El
Cronista:
Los datos son tozudos, aunque
quieran ocultarse un tiempo, emergen a la superficie de la actualidad y se
abren paso entre la hojarasca que trata de airear aquel que no desea mucha transparencia.
Los datos oficiales pueden ocultarse una temporada , pero no siempre es posible
aislarlos de la curiosidad del resto de los mortales y, al final, se hacen
visibles. Su visibilidad de golpe sorprende , siempre sorprende.
En este mediados de mayo, el
Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas del Gobierno de España, ha
publicado en su página web las deudas vivas ( las que mantienen con bancos y
cajas) todos los Ayuntamientos de España. Naturalmente el de Almagro también
las tiene. Eso lo sabíamos, lo que no podíamos intuir es que fueran tan
abultadas.
A finales de diciembre del pasado
año 2013, la deuda del Ayuntamiento de Almagro era de 6.641.000 euros, nada menos que
1.755.000 euros más que el año anterior. En mi opinión, Sr. Director, una
barbaridad.
Para no ser acusado de demagogo,
o de no decir la verdad, el mismísimo Ministerio de Hacienda ofrece los
siguientes datos sobre evolución de las deudas de nuestro Ayuntamiento. Las
deudas publicadas oficialmente son las siguientes:
Año 2.009 ( 2.866.000euros)
Año 2010 ( 3.275.000 euros)
Año 2011 ( 3.981.000 euros)
Año 2012 ( 4.886.000 euros)
Año 2013 ( 6.641.000 euros)
Cada almagreño puede sacar sus
conclusiones. En los últimos cuatro años se han DUPLICADO las deudas y tan sólo
otros once Ayuntamientos de la provincia de Ciudad Real ( casi todos grandes)
están por encima de esos números rojos.
¿Qué ha pasado?. Se nos vendió
que los nuevos valores del rigor y de la austeridad serían la bandera de un
tiempo que iba a estar por encima del bien y del mal. El resultado es que hemos
llegado a unas deudas escandalosas, como resultado de una acción de gobierno
municipal petrificada.
Supongo que habrá explicaciones
que, naturalmente, no se darán ni en Plenos Municipales ni en Bandos
Municipales ni en Emisoras Municipales. Quizá apliquen un poquito más de
hojarasca para que no reflexionemos sobre la realidad. Lo siento pero, mientras
tanto, tenemos derecho a expresar que este Ayuntamiento es una ruina.
Ángel López Jiménez
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